Pienso que el juego libre es
esencial para el desarrollo de todos los niños/as, porque de esta manera van
adquiriendo autonomía y desarrollando su inteligencia a través de la exploración,
el descubrimiento, el ensayo y error… Pero por supuesto que tiene sus
inconvenientes como bien se dice en el documento, ya que los niños/as siempre
juegan a lo mismo, a lo que les gusta, como es normal, y de esta manera no
pueden desarrollar todas las habilidades que podrían a través de otros juegos.
Por otro lado, el juego
dirigido es muy importante para desarrollar esas habilidades como he dicho
anteriormente, pero no debe efectuarse de forma exclusiva. Este tipo de juego
es más importante en el modo en que debe ser aprendido por los pequeños para
que tengan una especie de pautas marcadas, que también inducen al aprendizaje,
y que luego también les puede ayudar a la hora de jugar libremente.
En cuanto al juego orientado,
es una forma intermedia entre las dos anteriores, y que permite a los niños/as
una mayor libertad que el juego dirigido, pero que no es una manera tan
estricta y cuentan con el beneficio de poder ir más guiados.
En mi opinión, no existe el
juego libre frente a las actividades dirigidas. Ningún tipo es más o menos
importante que otro, sino que son complementarias y deberían irse practicando
de manera variada.
La información que he leído en
Internet referente al tratado ha sido sobre el juego libre sin directivas de
los adultos. Los niños/as escogen con qué, dónde jugar y cómo quieren organizar
su tiempo, pudiendo jugar o individualmente, o uniéndose a otros niños para
jugar libremente de basándose en sus necesidades internas, sin recibir órdenes
de los adultos.
He elegido hablar del juego
libre porque, a pesar de que tiene igual importancia que el dirigido, muchas
personas piensan en general que tiene menos peso, cuando es importante para
reforzar la identidad personal y autoestima de los niños, además de potenciar
que desarrollen habilidades como el esfuerzo, la creatividad, su imaginación...
Aunque la gente, como bien dices, le quite peso al juego libre, yo pienso que es con el que el niño mejor empieza a desarrollarse, ya que el sabe que le gusta y que le apetece y es lo que hará, y luego será el educador tras observar los gustos del niño, quien deberá organizar juegos orientados para potenciar el aprendizaje y desarrollo según los gustos de estos niños, para que no se queden siempre en los mismos juegos, ya que así, no aprenderá mucho más.
ResponderEliminarOpino lo mismo que María.El educador puede tomar como punto de partida de una actividad, las observaciones recogidas durante el juego libre, a lo que los niños le llaman más la atención o se decantan más.
ResponderEliminarBuen juego elegido Irene, pensamos exactamente lo mismo! Mucho ánimo en estas dos semanas que quedan!!
ResponderEliminarEstoy de acuerdo contigo cuando has escrito que ninguno es más importante sino que son complementarias para mi se deberían de impartir los tres tipos de juegos en los niños/as
ResponderEliminarMe alegra saber que tenemos la misma opinión Irene. Un saludito y buen finde =)
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